Atentos, porque os voy a contar mi versión de esta historia: todo comenzó en Frías, la ciudad más pequeña de España, esa que un buen día perdió su paz al correrse el rumor de que Cata Cues —o, mejor dicho, Catalina Cuesta— volvería para hacerse cargo del restaurante de su familia…
Lo que ella no se esperaba era que yo, Hugo Ruiz, el chef del momento, decidiera hacerme cargo del mismo. No sé por qué no se quedó con sus modelitos en la ciudad de la luz.
¿De verdad quieres comenzar por ahí? Sí, ya era hora de que yo, Cata Cues, me hiciera cargo del restaurante, por algo soy una Santamaría.
Estábamos condenados a unirnos con un fin; abrir La Tapita, esa que nos vio crecer y trazó nuestras vidas Y ahí venía un pequeñísimo problema: que no nos soportábamos.
Sin embargo, por conseguir nuestro objetivo, ambos estábamos dispuestos a firmar una tregua, lo cual, más o menos, parecía funcionar hasta que comenzó a resultarme imposible contener las ganas de que me arrancase la ropa cada vez que me provoca. A pesar de que juré que lo vivido era agua pasada, me iba a tragar mis palabras porque todo lo que ocurría apestaba a líos de los buenos.
Solo te puedo recomendar que reserves con tiempo una mesa y, recuerda, lo que suceda en La Tapita se queda en Frías.
Aquí tenemos una historia de comedia romántica muy al estilo de la autora, para quién ya la conocemos es muy fácil detectar su pluma donde encontraremos amor, pasión, amor, momentos divertidos, momentos de drama, situaciones extremas y muchas cosas más. Con una pluma ligera, sencilla, fluida, diálogos ingeniosos y divertidos, es de esas lecturas que una vez que comienzas terminas en un suspiro y quedas con ganas de más.
Ella, Catalina o Cata, parecía tenía la vida que por fin tanto anhelaba, pero ciertas circunstancias fuera de su alcance la hacen regresar a casa, de esa que huyó tiempo atrás. Él, Hugo, un Master Celebrity que también regresa al lugar que lo vio nacer, con todo el propósito de reabrir su restaurante… ambos tienen un pasado, uno que olvidaron y una vez que se reencuentran, las cenizas de lo que hubo hará que quizá esa llama vuelva a encender, pero no la tendrán tan fácil, hay demasiadas situaciones, su orgullo, vecinos cotillas, hasta un pajarillo entrometido que los pondrá en situaciones que en ocasiones podrán sonar medio inverosímiles, cómicas y hasta incómodas, que te arrancarán carcajadas sin poder evitarlo.
Pero no todo es miel sobre hojuelas, parece que el destino que alguna vez los separó y que hoy los vuelve a reunir aún no toma una decisión muy claro qué pasará con ellos, tendrán aliados y otros que les pondrán más piedras en el camino, su nuevo propósito es reabrir La Tapita el restaurante estrella en algún momento, en aquella pequeña ciudad turística en Frías. Lograrán reconciliarse y reabrir el negocio???
Como ya lo mencioné con una pluma ligera, fluida y momentos únicos es una lectura refrescante que logra su objetivo. Tal vez el único pero que pondría es que tenemos un gran abanico de personajes y diálogos, que por momentos si logra confundir o distraer demasiado, y por momentos me perdía un poco, nada grave en realidad, pero lo curiosos a pesar de tener muchos personajes secundarios, todos y cada uno es indispensable para la trama, para la historia de cada uno de los protagonistas tanto en su pasado como en su presente, por ahí quizá me faltan momentos tranquilitos para un pequeño respiro y dejar que la lectura fluya sin problema, pero en general la he disfrutado mucho.
Buena lectura y divertida.
La Tapita es una comedia romántica donde conoceremos a Cata que por diversas situaciones debe regresar a su vieja ciudad y quizá olvidarse de su gran sueño para hacerse cargo de Las Tapitas y reabrir sus puertas, la único opción viable es Hugo, un Master Celebrity que también regresa a su pueblo natal… peleas, momentos inverosímiles, incómodos, graciosos, muchos vecinos cotillas y muchas cosas más harán que el pasado que nuestros protas tuvieron en el pasado quizá ahora tengan la oportunidad de arreglarlo, o tal vez, la verdad es que no la tienen muy fácil que digamos. Con una pluma ligera fluida, buenos diálogos y un gran abanico de personajes, es de esas lecturas refrescantes que te harán reír en varias ocasiones. Buena lectura y recomendada!!!
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